¿Cuándo abriste La Fortuna y qué te inspiró a hacerlo?

Compramos la propiedad, que era una antigua finca de café de hobby, en diciembre de 2010 y pasamos dos años construyendo la infraestructura ya que no había electricidad, agua ni edificios que mencionar. Nuestro primer cliente de pago fue en octubre de 2012. Nos inspiramos para crear La Fortuna en Atitlán mientras viajábamos por el Sudeste Asiático en 2009. Mi esposo es estadounidense y yo soy canadiense, y nos dimos cuenta de que queríamos comenzar nuestra nueva vida juntos en una nueva ubicación, y ambos habíamos estado en Guatemala juntos y por separado, y nos encantó la paz y tranquilidad que ofrecía el Lago Atitlán. El diseño del hotel boutique ecológico se basó libremente en una variedad de cabañas de bambú y madera en las que nos hospedamos en Bali y Filipinas. También queríamos asegurarnos de tener un impacto mínimo en la tierra, por lo que decidimos estar fuera de la red y somos 100% alimentados por energía solar. También usamos materiales locales, y renovamos temprano. Intentamos cultivar aquí un buen porcentaje de nuestra propia comida también. Aún cosechamos 1,000 libras de café que servimos a nuestros huéspedes!

¿Qué es lo que más amas de La Fortuna?

¡No hay invierno! No, en serio, el clima aquí es bastante perfecto. Llaman al Lago Atitlán la tierra de la eterna primavera, ya que nunca hace demasiado calor ni frío. Tenemos una brisa encantadora todo el tiempo, y durante el día hace suficiente calor para un chapuzón en el lago, y por la noche refresca para que estés cómodo bajo tu edredón de plumas. La vista espectacular de tres volcanes rodeando un lago tampoco está nada mal!

¿Cuál ha sido la parte más gratificante de abrir La Fortuna?

Esta es la primera vez que mi esposo y yo hemos poseído o dirigido un negocio, así que eso en sí mismo es bastante gratificante. Es agradable ver cómo una idea se une y funciona, y estar bien integrado en la comunidad que hemos abrazado como nuestro nuevo hogar también es increíble. Tenemos 18 empleados locales, algunos de los cuales han estado trabajando aquí desde que comenzamos el proyecto, y es realmente agradable ver que nuestro pequeño negocio tiene un impacto positivo en sus vidas al proporcionar un trabajo estable y agradable.

¿Cuál ha sido tu mayor desafío y cómo lo has superado?

El mayor desafío probablemente sea vivir lejos de nuestra familia y amigos de antes. Los primeros años tuvimos algo de nostalgia, pero desde entonces hemos hecho nuevos amigos y nos sentimos más parte de la comunidad aquí. También intentamos visitar a nuestra familia y que vengan a visitarnos tanto como sea posible. Nos encanta presentar a nuevas personas la belleza de Guatemala y Centroamérica.

Cuéntanos sobre tu equipo...

Tenemos un equipo bastante grande teniendo en cuenta que solo tenemos 5 bungalows, pero creemos que el servicio al cliente es realmente importante y no puedes hacerlo sin grandes miembros del equipo. Tenemos 4 gerentes de recepción/gerentes de primera línea, 2 gerentes de cocina a tiempo completo, 6 empleados de limpieza y servicio, 2 jardineros a tiempo completo (¡tenemos 5 acres!), 2 trabajadores de mantenimiento que son realmente buenos en albañilería y un jefe de mantenimiento que también es excelente en carpintería. El equipo se formó con el tiempo, pero lo más interesante es que el jefe de nuestra cocina en realidad construyó la cocina antes de mudarse a ser el chef principal. Quería estar en nuestra cocina tanto que trabajó durante un año para construirla y ponerla en funcionamiento. Ahora puede disfrutarla desde el interior. Intentamos dejar que nuestro personal haga lo que es bueno y también los animamos a aprender cosas nuevas para que puedan crecer. Creemos que cuanto más espacio haya para el crecimiento, más feliz estará el empleado y eso los hace querer permanecer en el hotel.

¿Qué sigue para La Fortuna?

La Fortuna se ha construido poco a poco con el tiempo. Abrimos en 2012 con solo dos bungalows, cocinábamos todas las comidas en nuestra casa y servíamos directamente a los bungalows. Para 2013 teníamos 4 bungalows, y para 2014 teníamos una recepción/bar principal y bodega de vinos donde los huéspedes podían disfrutar de sus comidas y bebidas. En 2015 añadimos una cocina industrial, y en 2017 añadimos un quinto y nuestro bungalow más lujoso con piscina privada de inmersión. Los últimos dos años nos hemos enfocado en el mantenimiento y agregando algunos bonitos toques pequeños a la propiedad, además de comenzar a construir una nueva casa para nosotros mismos. Esperamos construir dos suites más en los próximos años, pero estamos felices de mantener el ambiente de La Fortuna pequeño e íntimo.

¿Cómo ha ayudado Tab a La Fortuna?

Al estar fuera de la red y alimentados por energía solar, podemos tener problemas con la potencia y el equipo de tarjetas de crédito tradicionales. Sin embargo, nuestros huéspedes continuamente pedían esta opción, y debido a que Tab funciona con el iPhone de nuestro gerente y nuestro iPad de recepción, podemos usar las redes celulares si se corta la electricidad y aún completar la transacción. Es útil ya que los huéspedes no tienen que calcular cada centavo que tienen al finalizar la compra ya que estamos en una ubicación remota y les resulta difícil salir y obtener más dinero de un cajero automático. Definitivamente da tranquilidad a nuestros huéspedes saber que tienen esta opción.

¿Por qué es el Lago Atitlán un gran lugar para visitar?

¡Hay tantas cosas geniales para ver y hacer en el lago! Si quieres ver cultura, probablemente no haya un lugar mejor. La cultura local maya está viva y bien. Hombres y mujeres visten ropa tradicional, hablan varios dialectos de lenguas mayas, y venden hermosos productos artesanales locales y coloridos. También es un gran lugar para disfrutar de la naturaleza y hacer actividades como nadar, kayak, paddle boarding, senderismo, tirolesa, parapente y ciclismo. Lo tiene todo realmente.

¿Has notado alguna tendencia/cambio en el turismo?

En los últimos 10 años definitivamente vemos el turismo en aumento en Guatemala con la adición de más vuelos directos, y con más información proporcionada al público en general, se ha convertido en un lugar que la gente quiere visitar. Es genial ver que Guatemala se ha convertido en un lugar de interés para un espectro más amplio de viajeros y esperamos que esto continúe.

¿Cuál sería tu consejo para cualquiera que piense en comenzar su propio ecohotel?

Creo que mi consejo sería el mismo para cualquiera que inicie un negocio hotelero. Solo observa el mercado antes de comenzar y asegúrate de no duplicar lo que ya está allí. También encuentra algo que te haga destacar de la competencia. Tuvimos suerte ya que comenzamos en el auge de un aumento del turismo, por lo que había una necesidad de más alojamiento aquí en el lago. Si encuentras un lugar donde haya una necesidad, ¡lo más probable es que funcione!

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Puedes encontrar más información sobre La Fortuna en Atitlán Boutique Eco Hotel en su sitio web en http://lafortunaatitlan.com/ o en su Instagram @lafortunaatitlan.